Cada vez son más los padres y madres que deciden emprender este viaje a partir de los 50 años y es que aunque no se ha demostrado ninguna problemática psicológica por este motivo, hay algunas diferencias sustanciales frente a los que se convierten en padres a una edad más temprana. Nuestra psicóloga Diana Sánchez expone no solo disparidades negativas de ser madre tardía sino también algunas positivas que se han podido observar con los repetidos casos sucedidos.


Comentarios recientes